jueves, 5 de diciembre de 2013

ESTAR

Saber que alguien está contigo, pero no sólo físicamente, sino ESTAR, con mayúsculas y con todas las letras; estar comprometido, estar ilusionado, estar acompañado, estar protegido, estar enamorado... eso es lo mejor de la vida. Saber que puedes contar con alguien, que puedes confiar al 100%, que no te va a hacer daño porque te quiere, y porque eres un tesoro muy preciado en su vida... eso es un privilegio que llamaré felicidad.

Cuando alguien te hace saber que eres importante y que sin ti, las cosas tendrían menos sentido; cuando alguien es capaz de decirte todos los días que te ama, para verte sonreír y porque lo siente de corazón; cuando alguien sueña contigo cómo será su vida en el futuro y piensa hasta en el nombre de vuestro perro; cuando alguien conoce tus defectos, y a pesar de ello, se queda; cuando desearías casarte con esa persona, aunque fuese en el coche; cuando alguien quiere compartir contigo ese último trozo de chocolate, o te acompaña hasta la puerta de tu casa... eso es amor. Cuídalo. Escribe cosas bonitas para esa persona, para que las lea y recuerde cuánto le valoras, cuánto le quieres. No le dejes escapar, porque con esa persona, ya no hacen falta loterías. Cuando te cueste dormir, piensa en sus ojos, en esos ojos tan magos... y si alguna vez tienes que pedir un deseo, pide que nunca olvidéis porqué os enamorasteis.

viernes, 1 de noviembre de 2013

Happy Halloween

Dicen que Halloween es una de las noches más terroríficas del año, pero esta vez no fue así. Fue una noche perfecta. Tan perfecta que no se puede describir. Se siente tan especial, tan afortunada, que no se cambiaría por nadie ni por nada del mundo. Él es el responsable de todo y tampoco le cambiaría por nadie ni por nada del mundo.  Hoy, especialmente, se siente enamorada, un poquito más. Ya ha tenido esa sensación otras veces, pero al parecer aún no ha llegado a su límite de enamoramiento, y no quiere llegar nunca. Debe confesar que también hay momentos malos. Esos momentos o te matan o te hacen más fuerte, y cuando te hacen más fuerte, dejan de ser malos. Gracias a esos momentos, diremos, menos buenos, puedes distinguir después los momentos más felices. En efecto, uno de los tantos momentos felices que recuerda es el día en que empezó todo, o al menos cuando ellos piensan que empezó todo. Pero la verdad es que ahí sólo era la millonésima parte de feliz que ahora.
Dicen que el destino no existe, pero esta vez no fue así. De entre los 7.000 millones de habitantes del planeta, el amor de su vida vivía en el mismo país, en la misma ciudad y casi en el mismo barrio. Y aquella noche los caminos de esos dos pequeños imperfectos perfectos se encontraron. Algunos dirán que fue una simple casualidad. En realidad, todo apunta al perfecto destino.

Dicen también que el amor no dura para siempre, pero esta vez no fue así. Fue un amor perfecto.

jueves, 19 de septiembre de 2013

Que bonito me haces el mundo!

Que bonito me haces el mundo... y eso me gusta porque yo tiendo a complicarlo; pero a tu lado todo es tan fácil... Me haces feliz con pequeñas cosas que se van volviendo cada vez más grandes. Como tu sonrisa, la que quiero ver todos los días de mi vida porque sin ella estoy perdida. Elegir una peli, hacer la cena, recoger juntos, ir a comprar, cenar en casa de tus padres, irnos de vacaciones, cantar en un karaoke, cuidarme hasta en sueños... Y darme cuenta de que ya no quiero querer a nadie más y que eres tu y serás tu para siempre.

miércoles, 7 de agosto de 2013

Quiero...

Quiero que nuestro amor sea tan fuerte que pueda superar todas las dificultades que aparezcan en el camino. Quiero que este amor vaya creciendo, vaya cambiando... que nos queramos para siempre. Quiero que nos miremos con nuestros ojos de enamorados, que ya lo dicen todo sin hablar y que conserven su brillo, aunque alrededor de ellos vayan apareciendo arrugas. Quiero seguir coleccionando momentos y llenar mil cajas, hacernos mil fotos... quiero cantar, bailar, pasear, viajar... quiero hacer cosas nuevas, aprender, que me enseñes y pasar vergüenza por lo desastroso que será al principio. Quiero enseñarte a hacer otras. Quiero discutir, que sintamos tristeza, rabia,confusión, enfado... para que pasen los minutos y nos demos cuenta de que no podemos estar el uno sin el otro y reconciliarnos y pedirnos perdón.  Quiero que confíes en mi, que puedas ser siempre sincero, que puedas desahogarte... quiero que seas libre, que tengas tu espacio, que hagas cosas sin temor a que me enfade y que hagas otras para complacerme pero porque te salgan de corazón.  Quiero sorprenderte y enamorarte, que me vayaa conociendo hasta que sepas casi todo de mí y que eso que vayas conociendo te guste todavía más que lo anterior. Quiero que sientas que te quiero, que estoy loca y perdidamente enamorada de ti y que estoy y estaré a tu lado siempre que me necesites.  Quiero hacerte feliz, ser tu apoyo incondicional, cuidarte... Todo eso lo quiero de verdad. Todo eso te quiero de verdad.

martes, 4 de junio de 2013

GRACIAS



Gracias por estos maravillosos 365 días. 365 días en los que no he dejado de quererte ni un segundo. 365 días impresionantes, increíbles, llenos de amor, complicidad, confianza, cariño, pasión, risas, apoyo… también alguna lágrima ¿por qué no? Todo, a tu lado, ha sido bonito. Y lo que es mejor, es que lo seguirá siendo, porque esta historia no acaba en el día 365, sino que mañana será el 366 día más especial de toda mi vida y pasado el 367 y así quiero que lleguemos hasta el 32947483754858725797485… Gracias por hacerme un poco más feliz, por los detalles que nunca se acaban, por cuidarme, por hacerme sentir única. Gracias por enamorarme día a día, cada vez más. A veces pienso que esta historia no puede ser real, pero ahí estás tu para recordarme lo que sientes por mí, y aunque me parezca increíble no te importa repetírmelo una y otra vez. Gracias por quererme. De sobra sabes lo que yo te quiero a ti, no hace falta que te lo diga pero puedo decir sin miedo a equivocarme que eres el amor de mi vida. El único con el que quiero despertarme todos los días y acostarme todas las noches. El único que es capaz de hacerme reír mientras me besa en el puente Besson. El único con el que quiero compartir mi vida. El mejor. Te quiero.

lunes, 13 de mayo de 2013

Hay cosas que no se pueden escribir

Si tuviera que escribir un libro las páginas estarían llenas de "te quieros". Si tuviera que encontrar a alguien mejor, pasaría la vida entera buscando y no lo encontraría. Si tuviera que vivir otro amor tan especial y tan bonito como este...eso, sería imposible. Hay cosas que no se pueden escribir, sólo se sienten.

domingo, 24 de marzo de 2013

Sinceramente



Se puso a pensar en él, en lo que le gustaba ese chico. Cada vez la resultaba más difícil expresar con palabras todo lo que podía llegar a sentir por él. Después de haber pasado juntos las últimas veinticuatro horas, echaba de menos todo... sus manos, sus ojos, sus labios, sus risas, sus canciones, sus historias, su habitación, su colchón, sus zapatillas… y eso que solamente llevaba tres horas sin él. Suerte que si se acercaba las manos a la cara, todavía podía sentir su olor. Se sentía tan feliz, que la daba miedo. En medio de esa sensación extraña, la encantaría poder gritar por la ventana que estaba loca y perdidamente enamorada de él, la gustaría no parar de enviarle mensajes confirmándole su amor, sería capaz de estar toda la noche hablando con él, sin pegar ojo, firmaría donde fuese para no separarse nunca de él, pero también, la encantaría explicarle porqué a veces no se entiende ni ella, así que cogió papel y lápiz y empezó a escribir, como si del famoso manual de instrucciones se tratara, con la esperanza de que algún día lo leyera y la pudiera comprender:

Hay veces que no consigo controlar mis celos, mis miedos, mis dudas… y siento que voy deteriorando poco a poco la historia tan bonita que hemos creado y, después, cuando pienso en que puedes hartarte y yo perderte, me da más miedo aún. No es que no confíe en ti; es que no confío en que yo te pueda gustar para siempre, en que me puedas querer tanto que nunca te vayas… Igual porque lo he vivido de cerca… Entiéndeme esas veces,  y ayúdame a no pensar en esas cosas que nos hacen discutir, cállame con un beso, y si es mejor un abrazo, que sea un abrazo-beso de esos, en los que consigues que me sienta única. Si aún así no consigues callarme, no te hartes, por favor, porque no quiero que te vayas, lo único que quiero, en ese momento, es que te quedes más y más cerca. Puede que las “broncas” sean una extraña forma de pedir que me quieras. Soy así de difícil, o así de fácil (ahora que te lo he confesado) y así de rara...

domingo, 24 de febrero de 2013

Lo esencial

A veces me pregunto por qué soy especial para ti y no encuentro respuesta, pero lo cierto es que me haces sentir tan bien, que la palabra "especial" se queda corta...Solamente con mirarme me haces sentir tanto que si me preguntaran qué es el amor, les daría mis ojos para que pudieran verte cuando me miras de esa forma y entonces no haría falta más explicación. 

Por si algún día te preguntas por qué eres especial (o más que especial)... 

- ¿Qué significa "domesticar"?- le preguntó el principito-.
- Significa "crear vínculos", si tu me domesticas, entonces tendremos necesidad el uno del otro. Tu serás para mí único en el mundo, yo seré para ti único en el mundo...
- Comienzo a comprender- dijo el principito-. Hay una flor...creo que ella me ha domesticado...
- Es posible- concedió el zorro. Si tu me domesticas, mi vida estará llena de sol. ¿Ves allá abajo los campos de trigo? Tu tienes los cabellos dorados y será algo maravilloso cuando me domestiques. El trigo, que es dorado también, será un recuerdo de ti. Y amaré el ruido del viento en el trigo. El zorro se calló y miró un buen rato al principito: -Por favor...domestícame- le dijo.
- Bien quisiera- le respondío el principito pero no tengo mucho tiempo. He de buscar amigos y conocer muchas cosas.
- Sólo se conocen bien las cosas que se domestican- dijo el zorro- ¡Si quieres un amigo, domestícame!
- ¿Qué debo hacer?- preguntó el principito.
- Debes tener mucha paciencia- dijo el zorro-. Te sentarás al principio un poco lejos de mí, así, en el suelo; yo te miraré con el rabillo del ojo y tu no me dirás nada. Pero cada día podrás sentarte un poco más cerca...
El principito volvió al día siguiente.
- Hubiera sido mejor- dijo el zorro- que vinieras a la misma hora. Si vienes, por ejemplo, a las cuatro de la tarde; desde las tres yo empezaría a ser dichoso. Cuanto más avance la hora, más feliz me sentiré. A las cuatro me sentiré agitado e inquieto, descubriré así lo que vale la felicidad. Pero si tu vienes a cualquier hora, nunca sabré cuándo preparar mi corazón...
De esta manera el principito domesticó al zorro. Y cuando se fue acercando el día de la partida:
- ¡Ah!- dijo el zorro-, lloraré.
- Pero he ganado- dijo el zorro- he ganado a causa del color del trigo. Y añadió:
- Vete a ver las rosas: comprenderás que la tuya es única en el mundo. Volverás a decirme adiós y yo te regalaré un secreto.
El principito se fue a ver las rosas a las que dijo:
- En nada se parecen a mi rosa. Nadie las ha domesticado ni ellas han domesticado a nadie. Son como el zorro era antes, que en nada se diferenciaba de otros cien mil zorros. Pero yo le hice mi amigo y ahora es único en el mundo. Son muy bellas, pero mi rosa es más importante que todas, porque yo la he regado, ha sido a ella a la que abrigué y cuidé, y es a ella a la que he oído quejarse, alabarse y algunas veces hasta callarse. Porque es mi rosa. Y volvió con el zorro.
He aquí mi secreto, que no puede ser más simple: sólo con el corazón se puede ver bien; lo esencial es invisible para los ojos. Lo que hace más importante a tu rosa, es el tiempo que tu le has dedicado. Eres responsable para siempre de lo que has domesticado. Tu eres responsable de tu rosa...- dijo el zorro-, -Yo soy responsable de mi rosa...-repitió el principito para recordarlo.



El principito.
Antoine de Saint-Exupéry

lunes, 21 de enero de 2013

En Babia


Ni en el mejor de sus sueños se había imaginado todo lo que está viviendo con él. Cómo iba a pensar que después de tanto tiempo como amigos, llegaría a sentir algo por ella. Aunque, reconoce que lo había pensado tantas veces. Ella, por alguna extraña razón, sabía que congeniarían, sería bonito. Incluso, había momentos que se acercaban a sus sueños pero… siempre acababa autoconvenciéndose de que no podía ser. El destino seguía manteniéndoles al lado, o quizás, fuesen ellos. De repente, como en una película de chico y chica en la que ya sabes cuál va a ser el final a los cinco minutos de empezar, se buscaban más y hacían todo lo posible por encontrarse. Ahora, se ha dado cuenta de que los mejores amores no son los de película, porque esos sólo duran dos horas, que los chicos que dicen: “¡Buenos días, princesa!” no sólo existen en los libros y que la declaración de amor más bonita es una canción de Melendi.