Gracias por estos maravillosos 365 días. 365 días en los que
no he dejado de quererte ni un segundo. 365 días
impresionantes, increíbles, llenos de amor, complicidad, confianza, cariño,
pasión, risas, apoyo… también alguna lágrima ¿por qué no? Todo, a tu lado, ha
sido bonito. Y lo que es mejor, es que lo seguirá siendo, porque esta historia
no acaba en el día 365, sino que mañana será el 366 día más especial de toda mi
vida y pasado el 367 y así quiero que lleguemos hasta el
32947483754858725797485… Gracias por hacerme un poco más feliz, por los
detalles que nunca se acaban, por cuidarme, por hacerme sentir única. Gracias
por enamorarme día a día, cada vez más. A veces pienso que esta historia no
puede ser real, pero ahí estás tu para recordarme lo que sientes por mí, y
aunque me parezca increíble no te importa repetírmelo una y otra vez. Gracias
por quererme. De sobra sabes lo que yo te quiero a ti, no hace falta que te lo
diga pero puedo decir sin miedo a equivocarme que eres el amor de mi vida. El
único con el que quiero despertarme todos los días y acostarme todas las
noches. El único que es capaz de hacerme reír mientras me besa en el puente
Besson. El único con el que quiero compartir mi vida. El mejor. Te quiero.